A MI HIJA SARA

Sara, mi Sarita, hoy es el inicio de un año más en tu vida, y en este día que cumples un año más quiero decirte que te deseo todo lo mejor del mundo.

Un día tú fuiste esa niña que me robó el corazón, y hoy eres la mujer que lo llena de orgullo.

Es un orgullo y un privilegio ser tu padre, y a lo largo de estos años haber acompañado tu crecimiento, tu evolución, tu brotar hacia el mundo, pero, aunque ahora seas adulta, para mí serás siempre esa niña que alegraba mi existencia.

Quiero que sigas tu camino sin dudar nunca de tu fuerza y capacidad para conquistar lo que te propongas. 

Me has dado esos tres nietos preciosos y geniales, que más te puedo pedir, y quiero que sepas que estoy muy orgulloso de ser tu padre. 

Hoy celebras un año más de experiencias, aventuras y sueños realizados. 

Deseo que la vida sea siempre tu gran amiga, y nunca olvides que estaré siempre a tu lado para todo.

Pues para mí siempre serás mi amor verdadero y eterno. 

¡Feliz cumpleaños, hija mía! 

Te deseamos tanto tu madre como yo, muchas alegrías para hoy y que todos los días de tu vida encuentres razones para ser feliz.

¡¡Te queremos a rabiar!! 

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